Reseña: Sir Paul McCartney en México
Advertencia: Post largo, lleno de subjeividades
Antecedentes
1993
Corría el año de 1993, tenía 9 años, no sabía aún cómo funcionaba nada, creo que aún no encontraba un lugar en el tiempo y espacio, mucho menos sabía algo de melomanía, no tenía conciencia de The Beatles, de ser fan, de ser fan from hell, nada.
Me acuerdo que llegábamos a un lugar muy grande, con bardas y gradas impresionantes para mi corta edad. Era de noche y había poca gente a los alrededores, iba con mis hermanas y mis padres, mi papá, recuerdo muy bien, llevaba una chamarra de Marlboro roja con blanco, la cual le gustaba muchísimo.
Recuerdo lo que se oía en esos momentos entre mi familia, cosas como:
—¡Ojalá lo vea un poquito!
—¡Ya se va a saltar!
—Pues ya adentro les das para su mordida para que te dejen acercarte más.
Hasta las quinientas entendí que adentro se celebraba un concierto de Paul McCartney y mi papá no tenía boleto e iba hacer lo que fuera por entrar a ver al Beatle aunque sea un momento. El recuerdo que le quedó de esa vez fue su chamarra rasgada y rota por los alambres de la barda que se saltó.
2002
Ya con 18 años, tenía conciencia de lo importante que eran los Beatles en la vida de mi papá, ya sabía que siempre los había de mencionar en cualquiera de sus pláticas y que sabe mil cosas de ellos, onda Enrique Rojas, jajaja, digo, después de tener dos cuadros grandes de ellos en la sala de mi casa, tenía que empezarme a quedar clara la onda Fan From Hell. Además que para estas fechas yo también ya era fan de los Beatles, descubriendo que me sabía las rolas de ellos sin haberlas escuchado antes, la respuesta a este extraño fenómeno es que desde que estuve en la panza de mi jefa los escuchaba. Nací con sus canciones, viví con ellas y ya era también, parte de la multitud de fans, al igual que mis hermanas que pasaron por lo mismo.
Era la segunda vez que venía Paul a México, mis hermanas ya trabajaban y una de ellas, Fanny, le compró el boleto para ir a verlo hasta adelante.
Un boleto, una experiencia, un sueño: ¡mi papá iba a ver a un Beatle! Ese día llegó y nos contó que había estado increíble, que había llorado y que ¡lo habían entrevistado!, para una emisora de radio de Toluca o de algún estado pequeño del país, y estaban en la cobertura del concierto. Para la revista dijo que había esperado toda su vida por ese momento.
2010
Tengo 25 años, ya no nada más entiendo la melomanía, sino que ahora soy una melomána feliz, me he hecho de mis propias figuras para ser fan, soy Fan From Hell de muchas cosas y de muchas personas, amigos, grupos, y hasta de mí misma, jejeje.
Se anunció que vendría Sir Paul a México, para mayo. Enloquecí e hice lo necesario por conseguir boletos para mi papá y para mis hermanas.
Para la primera fecha se acabaron super rápido y no alcancé boletos, casi chillé, se rumoraba que habría segunda fecha pero no confirmaban nada, me uní a Twitter, porque al parecer era la única fuente rápida y confiable para saber sobre esto, jajajajaj, (ahora, todo por eso soy twittera de hueso colorado), aquí me enteré que había un grupo para pedir una segunda fecha, me uní a dicho grupo "ONE MORE DAY #SirPaulMx". Vayan ustedes a saber si sirvió o no, pero casi quince días después se confirmó la segunda fecha y en la página oficial se explicó que gracias a la insistencia de sus fans, Paul aceptó dar la segunda fecha para México.
Conseguí el link mágico para obtener boletos antes de la venta y preventa, de modo que tuve mis boletos sin estrés y rápido, les dije a mis hermanas que no le dijeran a mi papá, para que fuera sorpresa y creyera que ya no iríamos.
Pasaron los días y un fin de semana antes del concierto, mi papá nos vino a visitar, a mi hermana y a mi, y aquí le dimos la sorpresa, para la cual, le compré el DVD de la gira y cuando se lo dí le dije: "pues ya que no iremos al concierto, vamos a ver lo que nos vamos a perder" mi hermana igual le hacia comentarios como: "que mal que no alcanzamos boletos, ya ni modo, lo bueno es que alguna vez ya lo viste" y mi jefe asi de: "za orale" jijijiji
El boleto se lo escondí en una bolsa de palomitas, ya hecha, de microhondas, jajajaja pero, ¿dónde salía el triste boleto? se acabaron las palomas y Maureen y yo así de: ¿papá ya no hay NADA en la bolsa? ¿NADA? jajajajaja, total que Maureen decidió medio sacar la bolsa que contenía el boleto y le dijo a mi jefe: a ver ¿qué es eso? y mi jefe lo saca y bromeando dice: "es un boleto para ver a Paul" y ya lo ve bien y dice: "¡¡ES UN BOLETO PARA VER A PAUL!!" jajajaja, ¡nunca se me va a olvidar su cara! y nosotras asi de: y no solo irás tu, ¡iremos todos! (bueno, menos mi mamá).
No pues la emoción estuvo muy buena, fue un momento familiar muy grato y dificil de olvidar.
EL concierto
Por fin llega el viernes 28 de mayo. La culminación de toda esa emoción de saber que ibamos a ver a un Beatle, a una leyenda, a alguien que tiene tantas historias que contar, que carga en su haber miles de agradecimientos de su público, por ser parte de su vida, indirectamente, a través de su música, alguien que ha atravesado fronteras enteras y que para él, es totalmente normal y cotidiano. Simplemente un Beatle...
Llegamos al foro separados, Fanny y yo por un lado y Maureen con mi jefe por otro, noo buenooo qué angustia para encontrarnos, ya faltaban pocos minutos para que empezara el concierto y yo sinceramente no quería estar allí sino era con mi papá, pues por fin iba a verlo y alocarse en todo su esplendor con su ídolo musical Paul, no me podia perder eso, además quería compartilo con el.
Total que nos encontramos, ¡descansé!
Y cuando menos sentimos que se apagan las luces, ¡auuuuuuuuuuu!
Empezó con Venus And Mars/Rock Show, la piel se me enchinó, siguió con Jet y All My Loving, volteamos y mi papá estaba llorando, ¡llorando! pues que nos ponemos a llorar las tres, jajajaja, muy emotivo, estábamos ahí compartiendo con mi papá su emoción, su melomanía, su vida.
Todos estabamos super emocionados y felices, estábamos viendo y escuchando a un Beatle, a una leyenda viviente, alguien del que se ha hablado tanto.
No podía quitarme de la cabeza una imagen de la Antología, donde iban llegando los Beatles a un estadio, con sus insulsos instrumentos y todo el estadio estaba lleno, solo se escuchaban gritos y gritos, al grado de que decidieron no tocar más porque la gente no los escuchaba, solo iban a verlos, de hecho en 1968, durante la última entrevista junto a John Lennon, todavía como The Beatles, McCartney dijo: "Hemos dejado de hacer conciertos porque solo escuchamos gritos". El entrevistador insistió y preguntó que cuándo retomarían las giras, Lennon replicó: "No mientras siga habiendo más gritos que música" Sin embargo Paul cedió: "Quizá en el futuro"
Me estremecía pensar que ese futuro había llegado.
Después de la conmoción, del llanto y la emoción, me dispuse a disfrutar del concierto, el sonido era muuuuy bueno, clarísimo y muy fuerte, temo y me arriesgo a decir que es el concierto con el mejor sonido al que he ido (este comentario sí fue objetivo).
La noche resultaba conmovedora, fresca, alegre, había muchas familias completas y hasta niños beatlemaniaticos que bailaban y coreaban muy contentitos.
Sonaba "Let 'Em In" cuando todo el Foro Sol prendió sus encendedores, pero no de la forma normal y tradicional de dejarlos prendidos, sino que los prendíamos y los apagábamos simultánemanete (bueno yo hice eso con el iPhone), ahhhh muy padre, momento mágico, tanto, que Paul nos pidió que lo repitiéramos y dijo que eso solo lo había visto aquí en México.
Luego la noche nos premió con la lluvia, yo que tanto miedo tenía que me fuera a mojar, que ni me importó, ya ni compré capita, cómo bien dijo mi hermana Fanny: "no te va a pasar nada si te mojas un poco" cuánta razón tuvo, jajaja. La lluvia me cayó tan bien, era muy agradable bailar y brincar bajo la lluvia al lado de mi familia.
Las canciones que se tocó de los Beatles me emocionaron muchísimo, las que no conocía me sirvieron para apreciar el sonido y al guitarrista que, no buenooo, se echaba muy muy buenos riffss, la batería se escuchaba muy clara y Paul, qué les digo, Paul increíble.
Algo que me impresionó fue su voz, sigue bien, no como la de papi Roger Waters, jajajaja, que ya suena a abuelito.
Otro momento relevante fue cuando tocó "Yesterday", fuera de que es la canción más choteada de la vida, me emocionó mucho presenciar en vivo, osea ¡en vivo! algo que fue, y sigue siendo, taaan representativo, algo asi como: "Cosas qué debes hacer antes de morir: ver a Paul MacCartney tocar Yesterday, en vivo"
Lo que más me gustó fue la interacción que tuvo con nosotros, era como si de verdad platicara con el público y luego en español, nooo buenooo, soñados todos.
La parte en la que chillé y chillé fue cuando recordó a Lennon. Me dio tanta nostalgia e impresión, escuchar a alguien, que fue amigo de otro Beatle tan significativo como Lennon, decir con toda la entereza y libertad del mundo "mi amigo Lennon." Me hizo sentir todavia más cerca de un Beatle.
Llegó Eleonor Rigby, una de mis canciones favoritas del cuarteto, me emocioné mucho y sentí muy chido porque mi papá y yo nos abrazamos y la cantamos juntos, ¡yeahhhh!, ¡another magic moment!
Finalmente, en el último encore, tocó Helter Skelter, otra rola que no podía morirme sin escucharla en vivo, y se siguió con Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band para cerrar gloriosamente con The End.
Se prendieron las luces.
Apólogo
Durante esta semana, durante el mismo concierto y al final de éste, llegaron a mi, todos estos recuerdos que les plasme arriba, desde mi jefe saltándose bardas, hasta mi jefe sacando el boleto de la bolsa de palomitas y llorando en pleno concierto.
Llegaron a mi como flachazos, como eventos a los que por fin puedo darles significado, puedo entender que la pasión y entrega que le das a las cosas que te gustan, son las que hacen que disfrutes de la vida y que no hay edad para seguir valorando y deleitándose con momentos mágicos.
La música, siempre ha sido significativa para mi familia, la apreciamos y respetamos mucho por lo que nos hace sentir, por cómo nos hace vibrar, lejos de clasificar si un artista haga bien su trabajo o no, lejos de críticas superficiales y contextos innecesarios, me parece que la importancia de un ser, sea famoso o no, radica en lo que te hace sentir, en lo que te transmite y en cómo lo recibes.
Paul me hizo sentir mucho, y más por lo que le hace sentir a mi papá. Como escribí en pleno concierto en el iPhone: "Es tiempo, son recuerdos, es VIDA" eso fue para mi este concierto y por eso se ha ganado con todo esplendor el título al: "Mejor concierto" al que he ido hasta ahora, desbancando a mi papi Roger Waters.
The End
Muchas gracias a los que llegaron hasta aquí, apreció su tiempo :)
Les dejo dos fotos:
Antecedentes
1993
Corría el año de 1993, tenía 9 años, no sabía aún cómo funcionaba nada, creo que aún no encontraba un lugar en el tiempo y espacio, mucho menos sabía algo de melomanía, no tenía conciencia de The Beatles, de ser fan, de ser fan from hell, nada.
Me acuerdo que llegábamos a un lugar muy grande, con bardas y gradas impresionantes para mi corta edad. Era de noche y había poca gente a los alrededores, iba con mis hermanas y mis padres, mi papá, recuerdo muy bien, llevaba una chamarra de Marlboro roja con blanco, la cual le gustaba muchísimo.
Recuerdo lo que se oía en esos momentos entre mi familia, cosas como:
—¡Ojalá lo vea un poquito!
—¡Ya se va a saltar!
—Pues ya adentro les das para su mordida para que te dejen acercarte más.
Hasta las quinientas entendí que adentro se celebraba un concierto de Paul McCartney y mi papá no tenía boleto e iba hacer lo que fuera por entrar a ver al Beatle aunque sea un momento. El recuerdo que le quedó de esa vez fue su chamarra rasgada y rota por los alambres de la barda que se saltó.
2002
Ya con 18 años, tenía conciencia de lo importante que eran los Beatles en la vida de mi papá, ya sabía que siempre los había de mencionar en cualquiera de sus pláticas y que sabe mil cosas de ellos, onda Enrique Rojas, jajaja, digo, después de tener dos cuadros grandes de ellos en la sala de mi casa, tenía que empezarme a quedar clara la onda Fan From Hell. Además que para estas fechas yo también ya era fan de los Beatles, descubriendo que me sabía las rolas de ellos sin haberlas escuchado antes, la respuesta a este extraño fenómeno es que desde que estuve en la panza de mi jefa los escuchaba. Nací con sus canciones, viví con ellas y ya era también, parte de la multitud de fans, al igual que mis hermanas que pasaron por lo mismo.
Era la segunda vez que venía Paul a México, mis hermanas ya trabajaban y una de ellas, Fanny, le compró el boleto para ir a verlo hasta adelante.
Un boleto, una experiencia, un sueño: ¡mi papá iba a ver a un Beatle! Ese día llegó y nos contó que había estado increíble, que había llorado y que ¡lo habían entrevistado!, para una emisora de radio de Toluca o de algún estado pequeño del país, y estaban en la cobertura del concierto. Para la revista dijo que había esperado toda su vida por ese momento.
2010
Tengo 25 años, ya no nada más entiendo la melomanía, sino que ahora soy una melomána feliz, me he hecho de mis propias figuras para ser fan, soy Fan From Hell de muchas cosas y de muchas personas, amigos, grupos, y hasta de mí misma, jejeje.
Se anunció que vendría Sir Paul a México, para mayo. Enloquecí e hice lo necesario por conseguir boletos para mi papá y para mis hermanas.
Para la primera fecha se acabaron super rápido y no alcancé boletos, casi chillé, se rumoraba que habría segunda fecha pero no confirmaban nada, me uní a Twitter, porque al parecer era la única fuente rápida y confiable para saber sobre esto, jajajajaj, (ahora, todo por eso soy twittera de hueso colorado), aquí me enteré que había un grupo para pedir una segunda fecha, me uní a dicho grupo "ONE MORE DAY #SirPaulMx". Vayan ustedes a saber si sirvió o no, pero casi quince días después se confirmó la segunda fecha y en la página oficial se explicó que gracias a la insistencia de sus fans, Paul aceptó dar la segunda fecha para México.
Conseguí el link mágico para obtener boletos antes de la venta y preventa, de modo que tuve mis boletos sin estrés y rápido, les dije a mis hermanas que no le dijeran a mi papá, para que fuera sorpresa y creyera que ya no iríamos.
Pasaron los días y un fin de semana antes del concierto, mi papá nos vino a visitar, a mi hermana y a mi, y aquí le dimos la sorpresa, para la cual, le compré el DVD de la gira y cuando se lo dí le dije: "pues ya que no iremos al concierto, vamos a ver lo que nos vamos a perder" mi hermana igual le hacia comentarios como: "que mal que no alcanzamos boletos, ya ni modo, lo bueno es que alguna vez ya lo viste" y mi jefe asi de: "za orale" jijijiji
El boleto se lo escondí en una bolsa de palomitas, ya hecha, de microhondas, jajajaja pero, ¿dónde salía el triste boleto? se acabaron las palomas y Maureen y yo así de: ¿papá ya no hay NADA en la bolsa? ¿NADA? jajajajaja, total que Maureen decidió medio sacar la bolsa que contenía el boleto y le dijo a mi jefe: a ver ¿qué es eso? y mi jefe lo saca y bromeando dice: "es un boleto para ver a Paul" y ya lo ve bien y dice: "¡¡ES UN BOLETO PARA VER A PAUL!!" jajajaja, ¡nunca se me va a olvidar su cara! y nosotras asi de: y no solo irás tu, ¡iremos todos! (bueno, menos mi mamá).
No pues la emoción estuvo muy buena, fue un momento familiar muy grato y dificil de olvidar.
EL concierto
Por fin llega el viernes 28 de mayo. La culminación de toda esa emoción de saber que ibamos a ver a un Beatle, a una leyenda, a alguien que tiene tantas historias que contar, que carga en su haber miles de agradecimientos de su público, por ser parte de su vida, indirectamente, a través de su música, alguien que ha atravesado fronteras enteras y que para él, es totalmente normal y cotidiano. Simplemente un Beatle...
Llegamos al foro separados, Fanny y yo por un lado y Maureen con mi jefe por otro, noo buenooo qué angustia para encontrarnos, ya faltaban pocos minutos para que empezara el concierto y yo sinceramente no quería estar allí sino era con mi papá, pues por fin iba a verlo y alocarse en todo su esplendor con su ídolo musical Paul, no me podia perder eso, además quería compartilo con el.
Total que nos encontramos, ¡descansé!
Y cuando menos sentimos que se apagan las luces, ¡auuuuuuuuuuu!
Empezó con Venus And Mars/Rock Show, la piel se me enchinó, siguió con Jet y All My Loving, volteamos y mi papá estaba llorando, ¡llorando! pues que nos ponemos a llorar las tres, jajajaja, muy emotivo, estábamos ahí compartiendo con mi papá su emoción, su melomanía, su vida.
Todos estabamos super emocionados y felices, estábamos viendo y escuchando a un Beatle, a una leyenda viviente, alguien del que se ha hablado tanto.
No podía quitarme de la cabeza una imagen de la Antología, donde iban llegando los Beatles a un estadio, con sus insulsos instrumentos y todo el estadio estaba lleno, solo se escuchaban gritos y gritos, al grado de que decidieron no tocar más porque la gente no los escuchaba, solo iban a verlos, de hecho en 1968, durante la última entrevista junto a John Lennon, todavía como The Beatles, McCartney dijo: "Hemos dejado de hacer conciertos porque solo escuchamos gritos". El entrevistador insistió y preguntó que cuándo retomarían las giras, Lennon replicó: "No mientras siga habiendo más gritos que música" Sin embargo Paul cedió: "Quizá en el futuro"
Me estremecía pensar que ese futuro había llegado.
Después de la conmoción, del llanto y la emoción, me dispuse a disfrutar del concierto, el sonido era muuuuy bueno, clarísimo y muy fuerte, temo y me arriesgo a decir que es el concierto con el mejor sonido al que he ido (este comentario sí fue objetivo).
La noche resultaba conmovedora, fresca, alegre, había muchas familias completas y hasta niños beatlemaniaticos que bailaban y coreaban muy contentitos.
Sonaba "Let 'Em In" cuando todo el Foro Sol prendió sus encendedores, pero no de la forma normal y tradicional de dejarlos prendidos, sino que los prendíamos y los apagábamos simultánemanete (bueno yo hice eso con el iPhone), ahhhh muy padre, momento mágico, tanto, que Paul nos pidió que lo repitiéramos y dijo que eso solo lo había visto aquí en México.
Luego la noche nos premió con la lluvia, yo que tanto miedo tenía que me fuera a mojar, que ni me importó, ya ni compré capita, cómo bien dijo mi hermana Fanny: "no te va a pasar nada si te mojas un poco" cuánta razón tuvo, jajaja. La lluvia me cayó tan bien, era muy agradable bailar y brincar bajo la lluvia al lado de mi familia.
Las canciones que se tocó de los Beatles me emocionaron muchísimo, las que no conocía me sirvieron para apreciar el sonido y al guitarrista que, no buenooo, se echaba muy muy buenos riffss, la batería se escuchaba muy clara y Paul, qué les digo, Paul increíble.
Algo que me impresionó fue su voz, sigue bien, no como la de papi Roger Waters, jajajaja, que ya suena a abuelito.
Otro momento relevante fue cuando tocó "Yesterday", fuera de que es la canción más choteada de la vida, me emocionó mucho presenciar en vivo, osea ¡en vivo! algo que fue, y sigue siendo, taaan representativo, algo asi como: "Cosas qué debes hacer antes de morir: ver a Paul MacCartney tocar Yesterday, en vivo"
Lo que más me gustó fue la interacción que tuvo con nosotros, era como si de verdad platicara con el público y luego en español, nooo buenooo, soñados todos.
La parte en la que chillé y chillé fue cuando recordó a Lennon. Me dio tanta nostalgia e impresión, escuchar a alguien, que fue amigo de otro Beatle tan significativo como Lennon, decir con toda la entereza y libertad del mundo "mi amigo Lennon." Me hizo sentir todavia más cerca de un Beatle.
Llegó Eleonor Rigby, una de mis canciones favoritas del cuarteto, me emocioné mucho y sentí muy chido porque mi papá y yo nos abrazamos y la cantamos juntos, ¡yeahhhh!, ¡another magic moment!
Finalmente, en el último encore, tocó Helter Skelter, otra rola que no podía morirme sin escucharla en vivo, y se siguió con Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band para cerrar gloriosamente con The End.
Se prendieron las luces.
Apólogo
Durante esta semana, durante el mismo concierto y al final de éste, llegaron a mi, todos estos recuerdos que les plasme arriba, desde mi jefe saltándose bardas, hasta mi jefe sacando el boleto de la bolsa de palomitas y llorando en pleno concierto.
Llegaron a mi como flachazos, como eventos a los que por fin puedo darles significado, puedo entender que la pasión y entrega que le das a las cosas que te gustan, son las que hacen que disfrutes de la vida y que no hay edad para seguir valorando y deleitándose con momentos mágicos.
La música, siempre ha sido significativa para mi familia, la apreciamos y respetamos mucho por lo que nos hace sentir, por cómo nos hace vibrar, lejos de clasificar si un artista haga bien su trabajo o no, lejos de críticas superficiales y contextos innecesarios, me parece que la importancia de un ser, sea famoso o no, radica en lo que te hace sentir, en lo que te transmite y en cómo lo recibes.
Paul me hizo sentir mucho, y más por lo que le hace sentir a mi papá. Como escribí en pleno concierto en el iPhone: "Es tiempo, son recuerdos, es VIDA" eso fue para mi este concierto y por eso se ha ganado con todo esplendor el título al: "Mejor concierto" al que he ido hasta ahora, desbancando a mi papi Roger Waters.
The End
Muchas gracias a los que llegaron hasta aquí, apreció su tiempo :)
Les dejo dos fotos:
Saludos.
